TU DESTINO EN LAS LÍNEAS DE LA MANO
Muchos esoteristas están convencidos de que en la palma de nuestra mano está escrito nuestro destino.
Es posible que así sea, pero hemos de seguir defendiendo la filosofía de que por encima de ese destino está nuestra libertad para dejarlo correr, aceptarlo o modificarlo, con todas las armas que tenemos para hacerlo.
Las líneas fundamentales son:
- La de la vida que está marcada en verde en nuestra ilustración.
- La de la cabeza, pintada en azul.
- La del corazón, en color rojo.
- Y la línea amarilla que es la de la suerte.
LA LÍNEA DE LA VIDA (dibujada en verde) empieza en la muñeca y cuando llega hasta la unión del dedo incide y el pulgar, es una vida extraordinariamente larga. Puede interrumpirse en algún tramo, pero si se reanuda, eso sólo significa tropiezos o pequeños incidentes sin importancia.
LA LÍNEA DE LA CABEZA (dibujada en azul) es la que indica nuestra capacidad para gobernar los pormenores de nuestra vida. A veces, como en el ejemplo de la fotografía, se une a la de la vida, y eso anuncia éxitos y una vida plena y sin grandes dificultades.
LA LÍNEA DEL CORAZÓN (dibujada en rojo) rige el amor. Su medida y la cercanía de estrellas o de líneas accesorias a ella, es lo que determina cuantos amores de verdad viviremos. Si se corta bruscamente es que viviremos un gran amor que durara toda nuestra vida.
LA LÍNEA DE LA SUERTE (dibujada en amarillo) es la más curiosa, porque lo mejor que puede pasar, la señal de que tendremos suerte, es que no exista, que no esté dibujada o que no esté claramente dibujada. También en este caso, si está rodeada de estrellas es anuncio de buena suerte, y los cuadrados avisan de tropiezos y dificultades en los tramos en que ejercen su influencia.
Hay símbolos a tener en cuenta como figuras de estrellas, cuadrados, islas…
Las estrellas cerca de una de las líneas son augurio de buena suerte en ese campo. Los cuadrados, tropiezos. Las islas o círculos, interferencias.
Pero recuerda siempre que nuestra libertad está para, conociendo donde están los tropiezos, eludirlos y evitar sus consecuencias.
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