LOS PUNTOS MÁGICOS DE CADA CASA
En todos los espacios, casas o negocios, existen lugares mágicos. Los más reconocibles coinciden con los cuatro puntos cardinales.
Si no disponemos de una brújula es muy fácil ubicarlos. El Este es el lugar por donde sale el Sol, por lo tanto, si os colocáis de frente a él, ese punto de la casa es el punto mágico del Este. Mirando hacia ese punto, justo a vuestra espalda está el Oeste, a la derecha el Sur y a la mano izquierda el Norte.
Se pueden potenciar esos valores y esos puntos mágicos de muchas maneras, pero la más sencilla es una vela del color correspondiente en cada uno de ellos, y hay que encenderlas cuando se necesite activar uno de los sectores o hacer alguna petición concreta.
El Este es el rincón mágico de la comunicación, el entendimiento, el talante positivo… Es el lugar preferido de la Diosa Aine, la Diosa de las ideas y los pensamientos. Ahí debes tener siempre una vela violeta.
El Sur, la salud, la energía física. Y este es el lugar de Mórrigan, la Diosa Celta de la Fuerza. Es el espacio de tu casa donde has de colocar la vela roja.
El Oeste es para el amor y el mundo de los sentimientos, y ahí se siente muy cómoda Deva, la Diosa que los rige. El color de la vela que ha de estar en ese punto cardinal, en esa Atalaya, es la verde.
El Norte para los bienes materiales. Y ahí es Epona, la Diosa de la defensa y de la abundancia, la que tiene su lugar. Nada faltará en tu hogar si potencias el punto mágico de esa Diosa prendiendo, cuando sea necesario, la vela marrón que ha de estar en él.
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