LAS NAYADES, LAS GUARDIANAS DE LOS SUEÑOS…
Cuenta la leyenda que las Náyades son entidades mágicas muy poco conocidas y hoy intentaré acercarte un poco a esos pequeños genios de la Naturaleza.
Las Náyades, como las Ondinas, se consideran deidades menores al cuidado del agua, pero así como las primeras cuidan de los mares, las Náyades cuidan de los ríos, las fuentes, los lagos y todos aquellos lugares donde el agua es dulce.
Al contrario que las demás fuerzas que habitan las aguas, ellas no son eternas, su vida se condiciona al lugar donde están asignadas, así que cuando un río, un lago, o un estanque se agotan o se secan, ellas mueren.
Si amas nuestra cultura, la cultura que cree en ellas y que cree, que en las épocas en que las lluvias no llegan y los ríos disminuyen sus cauces y las fuentes se secan y los pequeños lagos desaparecen, las Náyades que los habitaban desaparecen con ellos…
No malgastes el agua.
Y cuando te acerques al entorno donde viven, comunícate con ellas asomándote a la superficie del agua. Las náyades son entidades que conocen los sentimientos de las personas, los comparten y los entienden por que en cierta medida ellas tienen la vulnerabilidad de los humanos.
Hazles un sitio en tu hogar. Pon, en algún lugar de tu casa, una copa de cristal con agua a la que debes añadirle unas ramitas de alguna de las plantas mágicas de Deva y sus náyades, camelias, hiedra, hierbabuena, o unos palitos de canela.
Cámbialo cuando veas que el agua se enturbia un poco.
De esta manera tan sencilla les haces participe de tus inquietudes y compartes con ellas tus sueños. Aseguran que las Náyades, a través de esa ofrenda se identificarán con tus deseos e intercederán con los Dioses, como fuerzas intermediarias que son, para que te concedan lo que necesitas.
Cuida de ellas, cuidando del agua y ellas te lo agradecerán cuidando y protegiendo tus sueños…
(La ilustración es de Susan Jeffers)
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