LA HIERBA GALLEGA DE ENAMORAR
Hoy quiero recordar contigo una leyenda muy antigua.
Es una de esas leyendas que se destaca entre todas las que forman el patrimonio mágico de mi tierra y que a pesar de que su origen se pierde en los más remotos confines de la historia sigue teniendo, hoy como siempre, la vigencia y el respeto de todos los que creemos que la magia existe y está, sin duda, en los pequeños milagros de la Naturaleza. Y…
Cuenta la leyenda que, en las costas del norte, desde la primavera y hasta que el otoño se asoma, en las partes más altas y escarpadas de los acantilados nace una flor que se mantiene viva y resiste los caluros días del verano, la fuerza de los soles y la fría caricia de todas las Lunas.
Y dicen que esa flor tiene en su esencia el poder de dos diosas. La diosa Aine, que gobierna los cuatro vientos. Y la Diosa Deva, que es la dueña de todos los mares. En mi tierra, a esa flor, la conocemos como “la namoreira” o la flor de enamorar
Los más ancianos de la comarca dicen que si la recoges un atardecer en el momento en que la luna está escondida tras el sol, en Luna nueva y al hacerlo invocas los nombres de las diosas, el amor estará siempre en tu vida.
La costumbre es guardarla en una cajita de madera, con algo de plata y algo de oro. Has de saber también que, aunque se seca, no pierde ni su color ni su belleza.
Y dicen que, todo el que sube hasta esa altura y la recoge con respeto y fe, encontrara el amor, si aún no lo tiene y afianzará el que ya existe. Si alguna vez vienes por mi tierra y te acercas a esos lugares, no dejes de buscarla. Ahí te la dejo para que puedas reconocerla…
Maribel ( Yash) Martínez Montoro
septiembre 29, 2020 12:03 pmQue bonita, que pena que a mí me quede tan lejos. Si algún día puedo estar en esa maravillosa tierra trataré de encontrarla.
cosasdemeiga
octubre 3, 2020 6:05 pmAlgun dia, tal vez…