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Descripción

Ya sabes que, Epona, la diosa celta encargada de protegernos y de cuidar de nuestros espacios y de las personas que son importantes para nosotros, adora esta piedra: la turmalina negra.

No me canso de recomendar este maravilloso mineral que armoniza a quien lo tiene, rechazando el mal, anulando los hechizos y maldiciones que existan, incluso los que ya están desde hace tiempo alterando nuestra vida y por los que, los caminos parecen cortados y nuestra suerte anulada.

Esta pulsera es muy cómoda y fácil de llevar por su sencillez.

Te recuerdo una de sus ventajas: bloquea las energías negativas y las hace girar para regresar a su origen, al lugar y a las personas que nos las han enviado.

Ha de llevarse en la muñeca izquierda y es una de mis piezas favoritas, porque añadido al valor de la turmalina está el símbolo del árbol de la vida, una pieza muy importante en todos los amuletos que sirven para potenciar la suerte.

Este amuleto será consagrado en mi altar, bajo la influencia de la luna menguante.

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